sábado, julio 19, 2008

sábado

*El 29 de septiembre de 1980, el Washington Post publicó un artículo revelador escrito por la periodista Janet Cooke. "Jimmy's World", tal el título del escrito, trataba acerca de la vida de Jimmy, un nenito de ocho años que –y aquí la noticia– era tercera generación de una familia de adictos a la heroína. Jimmy, con su pelo arenoso, sus ojos de terciopelo marrón y sus marcas de aguja en su piel de bebé. La investigación de Janet ganó un Pulitzer. La investigación de Janet era mentira.

*En marzo de 2003, el periodista Jorge Zicolillo envió desde Bagdad –"desde el frente"– varias crónicas para la revista TXT sobre el desarrollo de la guerra de Irak. Tiempo después se supo que Zicolillo nunca había salido de su departamento de la ciudad de Buenos Aires. Palermo Bagdad.

*También en 2003, pero en mayo y en Estados Unidos, se descubrió que Jayson Blair, de 27 años, periodista del New York Times, había estado al menos durante seis meses inventando noticias y plagiando artículos. Más tarde, desde el New York Times dirían: "hemos detectado hasta ahora irregularidades en por lo menos 36 de los 73 artículos que escribió".

*Nahuel Maciel comenzó su carrera en el Cronista Comercial. Mario Diament, director del matutino en ese entonces, lo describe así: “Era de baja estatura, cuerpo enjuto y una mirada inocente enmarcada entre rabiosos mechones de pelo lacio y una barba intensamente negra. Traía, según dijo, una recomendación de Eduardo Galeano y otra del escritor Oscar Taffetani, de la revista El Porteño y se presentó como un indio mapuche que había escrito artículos para "Le Monde", de París y "The National Geographic", algunas de cuyas fotocopias traía consigo para probarlo. Venía a ofrecer –dijo– una entrevista con Mario Vargas Llosa que había realizado vía fax, lo cual, para una editora que acaba de ver pulverizarse la nota principal del suplemento, caía como maná del cielo”. Maciel continuó su trabajo con entrevistas exclusivas realizadas a notables personajes de la cultura a nivel mundial, como Gabriel García Márqueting, Umberto Eco, Ray Bradbury, Carl Sagan, entre otros. No mucho tiempo después, una serie de eventos inesperados llevaría a descubrir que todo lo que manaba de la pluma de Maciel era producto de su fértil y febril imaginación.

*Todo para decir que en este domingo de nubosidad variable no sólo no se me ocurre nada, sino que ni siquiera tengo las ganas suficientes como para ponerme a inventarlo.

2 comentarios:

Julia dijo...

Lo q se dice periodismo ficción posta. Un profesor de escritura se enojaba porq decía q no me salía escribir narrativa y q la cortara con el periodismo ficción. Dos años después sigo intentándolo. Es una lucha! (De todos modos, me encanta ficcionar la realidad, y es inevitable q mi narrativa surja de ahí)
saludos!

Anónimo dijo...

convengamos que ganar un premio tan reconocido mintiendo tiene que tener su merito. Y lo del ultimo sujeto tambien. Hay que tener semejante imaginacion. Ahora en tu caso creo que es como que aunque no quisistes ponerte a escribir algo sacastes. Suerte